El fuego de la presencia de Dios

Muchos creen que Dios est en todas partes, pero todav a no han experimentado su presencia. Qu signific para Mois s encontrarse con Dios en la zarza ardiente? C mo cambi su vida y su percepci n de Dios? Qu le impide a usted experimentar la presencia de l en su vida?

Fue mediante esa experiencia con la zarza ardiente que Mois s empez a entender y a apreciar lo sagrado de la adoraci n. A trav s de este libro, Tozer ense a que la adoraci n apropiada tiene que encajar con lo que estamos adorando; por eso, si adoramos a Dios, debemos hacerlo en sus t rminos. Esto implica tener un esp ritu de reverencia y santidad, como Mois s cuando se quit el calzado de sus pies y se arrodill ante l.

El fuego de la zarza no atemoriz a Mois s, sino que hizo derramar la esencia de lo sagrado en su vida, d ndole una experiencia que nunca antes hab a tenido. Permita que este libro le ense e --como a Mois s-- a arrodillarse y a adorar ante el fuego sagrado de Dios.